sábado, 17 de diciembre de 2011

Pesto 2011


"Pase lo que pase ahora, estoy muy orgulloso de ustedes y de haber llegado hasta acá muchachos".

Por qué no, vamos a empezar por el autor de estas palabras. Desde que le fue designada la cinta de capitán, Santiago Núñez empezó tomar un rol protagónico cada vez más importante para el equipo. Llegando siempre entre los primeros (aunque lo hizo desde siempre), el líbero aportó su análisis y arenga como párrafo aparte de las charlas del "Profe" y ayudó a subir los ánimos tanto adentro como afuera de la cancha, como un verdadero líder. Además de la parte emocional, el central le aportó la base a la columna vertebral del equipo ubicándose como último hombre.

Ahora sí, empezamos por el principio: Fran. Arrancó como el tercer arquero la verdad, por que sólo un equipo con nuestra suerte puede pasar de tener dos excelentes arqueros a ninguno. Pero finalmente, como bien dijo él en el último partido, desde que llegó como rueda de auxilio hasta los octavos de final, se convirtió en uno más del equipo, en una pieza clave de hecho. Si bien empezó con dudas, terminó rompiendo el récord de vallas invictas y brindandole seguridad al resto del equipo.

Pato, Pato, Re. A su pesar, fue el único que no pudo marcar su presencia en la red, pero bien que la marcó con creces dentro de la cancha. Sobriedad en la salida, sacrificio y temple. Transmitió, desde el primer partido, seguridad y confianza (además de las patadas, claro está -y qué patadas).

Juancito, otro de hacha y tiza. Tuvo una importante pelea con el capitán (pese a las fotos que le daban a la prensa) pero supo hacerse un lugar importante en el equipo. Cumplió su rol tanto como central cuando hizo falta, como como volante por izquierda. Comprometido con el equipo, siempre jugó hasta dar su último aliento.

Seba "toco y me voy" García. El distinto del torneo pasado, esta vez no pudo formar la prometedora sociedad que todos esperábamos con Nico Martínez, pero aportó siempre su cambio de ritmo, sus goles, sus gambetas abre-partidos y corrió siempre hasta la última bola. Lástima que sus colectivos salían a la una y media y llegaban a las tres y diez por arte de magia.

Jony "5 pulmones" Saint Martin. El único que realmente tenía el físico para aguantar todo el partido, y en una posición que exige estar en constante moviemiento. Funcionó tanto como rueda de auxilio en el fondo, como salida en el medio y hasta como carta de gol con sus grandes pases y pegada. Le quedará la espina de no haber podido convertir los últimos penales, pero el que se atreva a recriminarle algo que tire la primera piedra.

Fede Della Porta. El ex capitán tuvo una temporada muy complicada debido a las lesiones que lo alejaron de las canchas durante casi toda la fase eliminatoria y se le hizo complicado acomplarse al ritmo del equipo. Sin embargo, siempre que entró aportó el juego y sacrificio al que nos tuvo acostumbrados durante los años anteriores.

Santi Bravo. Aunque habitualmente arrancó desde el banco, su entrada siempre le daba un poco de aire al equipo y fue autor de goles decisivos como el 6-5 de la pretemporada y el 2-2 versus uno de los equipos que hoy es finalista del torneo (junto a Duendes). Otro que hizo lo posible para estar en todos los partidos pese a que su participación se vio interrumpida por diversas lesiones.

Nico Martínez. Yo, personalmente, te creí cuando dijiste que íbamos a salir campeones, y la vedad que si lo hacíamos era por vos. Como bien resaltó mi viejo, que te hayan atajado el penal decisivo no quita el hecho de que llegamos a los octavos por tus 7 goles (y que incluso tuviste dos palos en el último partido). Probablemente hayas sido el mejor jugador del torneo (y no me estoy limitando solamente a nuestro equipo) y esperamos poder seguir contando con tu grata presencia tanto dentro como fuera de la cancha el año que viene.

Sebastián "El Profe" Adúriz. Con más entusiasmo que el que yo imaginaba que este equipo le podía llegar a generar, se hizo presente prácticamente todas las fechas (algo que no prometió para el año que viene en caso de que renueve su vínculo) y logró darle al equipo la identidad que había perdido a principio de año. Poco a poco, las piezas fueron encajando y se pudo armar un equipo competitivo capaz de hacerle frente a cualquiera.

Iván "Chueco Alves" Racioppi. Como segundo entrenador, siempre aportó su valiosa opinión y se hizo cargo del equipo en un par de ocasiones, consiguiendo un importante 2-2 contra uno de los finalistas del torneo. La directiva está considerando darle el puesto definitivo en caso de que "El Profe" Adúriz se baje de cargo.

En definitiva, cerramos el año de manera positiva. Consolidamos el grupo, hicimos el equipo más sólido y nos quedamos afuera del torneo por el azar de los penales. Espero que el año que viene podamos dar el salto a cancha de once que tanto venimos esperando, o que al menos mantengamos este motor en marcha en cancha de siete. Y como dijo Santi más arriba, yo también estoy orgulloso de haber llegado hasta donde llegamos muchachos.