viernes, 13 de mayo de 2011

Qué placer verte otra vez

Otra vez empatamos, pero esta vez nos tocó al revés: empatamos nosotros, y dos veces. El partido lo salimos a buscar con el mismo esquema que la vuelta pasada: dos en el fondo, tres en el medio y uno de punta, sólo que esta vez el llanero solitario era Santiago Núñez, que volvía las canchas tras una lesión que lo privó de cuatro encuentros, siendo uno de ellos el último, que ya se jugaba por los puntos.

Tempranamente, cuando, me animo a decir, todavía no habían transcurrido cinco minutos de juego, nos encontramos con el resultado en nuestra contra, como la última vez que habíamos jugado en esa cancha, en aquella paliza que nos propinó La Previa. Fue una jugada extraña a decir verdad, porque no fue más que un tiro de lejos sin mucha dirección, pero que ingresó en el arco de todas maneras ya que Lucas Soule se encontraba con la vista obstruida por jugadores (propios y contrarios) y no pudo encontrar el destino de la pelota. A partir de ahí, se podría decir que tomamos las riendas del encuentro, y si bien no generamos muchas situaciones de peligro, dominamos la pelota, presionamos en el medio y dispusimos de un par de cabezazos que podrían haber sido el empate. Finalmente, poco antes de llegar al descanso, Adúriz ejecutó un tiro libre en corto para Sebastián García, quien en su intento de romperle la red al arquero rival, le terminó poniendo una asistencia al goleador que recién regresaba, Santiago Núñez, que, ubicado en el lugar y en el momento exacto, empujó la pelota para declarar las tablas e irnos más tranquilos al entreacto.

En el complemento la historia estuvo un tanto más pareja, aún con Pesto con más dominio de la pelota pero tampoco con el suficiente como para proclamarse dominador de la cancha. Y sin embargo, pese a que las intenciones del verdinegro eran mejores, Duffman volvió a ponerse en ventaja primero, en una jugada de un lateral que termina en un desborde, un pase al medio y un inmerecido 2-1 en contra. A la carga barracas, Pesto se mandó al ataque dejando huecos en la defensa en pos de conseguir el empate, y este, si bien se hizo desear y se negó en primera instancia a través del poste del arquero rival, llegó. Pelota cruzada de Jony Saint Martin para Santi Núñez, y, cuándo no, el delantero dominó, giró y facturó casi con el arquero encima, lo que dificultaba la definición. Tan sólo unos minutos después, una vez que el rival ya había vuelto a sacar del medio, Pesto generó lo que probablemente fue una de sus mejores jugadas del año: Adúriz para García, este para Saint Martin, Núñez que baja a pivotear, Saint Martin de primera pone el pase al hueco (generado por el pivoteo del 11) y García define de primera ante la salida del portero de Duffman, aunque el destino quiso que la pelota, una vez más, gambetee la ilusión y se vaya besando el palo izquierdo, en lo que fue una de las últimas de riesgo del partido.

Finalmente no hubo tiempo para más y nos fuimos nuevamente con un punto, que siempre suma, para casa. El equipo se mostró más ordenado y sobre todo con más carácter y unión ante la adversidad; y, de la mano de la vuelta de su goleador (3 goles en 3 partidos), logró llevarse un empate que le sirve para separarse del lote de abajo y acercarse al de arriba, en búsqueda de un lugar en los octavos de final. Ah, y Santi: qué placer verte otra vez con la 11 en la espalda.


3 comentarios:

lucas dijo...

a mi me gusto,no fue de las mejores que hiciste pero no salió mal

il nigga dijo...

il nigga

Adúriz dijo...

jajaja sos un fenómeno santi